Escultura en madera que representa a San Rafael Arcángel. Se le colocó una corona metálica y su rostro es fino y de adolescente. Lleva muceta que le cubre la espalda y hombros y sus extremidades inferiores las cubre un faldellín, calza botas a la usanza romana. Tiene un pescado sujeto con la mano izquierda y pegado a su torso, actualmente casi destruido; atributo que nos permite su identificación, así como la mencionada muceta de peregrino, parte de sus atuendos.
Observaciones del bien mueble
Carece de la mano izquierda, tiene ojos de vidrio y se localiza en el Retablo de la Pasión.