Este reloj de péndulo cuya fuerza motriz es la más sencilla, la fuerza de la gravedad con un contrapeso, que cuelga de una cuerda enrollada sobre un cilindro que transmite el movimiento mediante una rueda a piñones y ruedas que controlan dicho movimiento mediante el "paso de áncora de Graham". Algunas de las ruedas tienen dientes que en número de 60 permiten el conteo de segundos y horas.