Estas piezas que carecen de uso desde hace bastantes años, se conservan relativamente bien, gracias a su estructura rigida y pequeña dimensión. Son ejemplares de telas y técnicas del bordado desaparecidos hace años. Una de ellas tiene un trabajo en chaquira muy fina, del tipo que se traía en la Nao de la China. Sus colores corresponden al color de los ornamentos litúrgicos (casulla, dalmática, estola, etc.) que acompañaban.