Al terminar la conquista de México-Tenochtitlan un grupo de colonizadores españoles encabezados por Juan Franco, Juan de Salamanca y Cristóbal Ruiz fundan una cofradía bajo la advocación de Santa Catarina Mártir con el proposito de construir un hospital de beneficiencia y una pequeña iglesia. Para tal efecto el Cabildo les concedió un terreno en las afueras de la ciudad en el barrio que actualmente se conoce como la "la Lagunilla", el cual quedaba pasando el convento de Santo Domingo en el camino hacia Tlaltelolco. En 1538 el obispo Fray Juan de Zumarraga dedicó la capilla y en 1568 el obispo Alonso de Montufar la elevó al rango de parroquia. A consecuencia de la terrible inundación que sufrió la ciudad de México, en 1629 el templo tuvo que ser reconstruido quedando terminado el 22 de enero de 1622. Posteriormente le fue agregada en su parte norte una capilla dedicada a la preciosa Sangre de Cristo, la cual fue concluida el 25 de noviembre de 1693. En la primera mitad del siglo XVIII el templo quedo nuevamente arruinado por un severo hundimiento provocado por las características pantanosas del terreno sobre el cual se había construido. La parroquia fue reconstruida y ampliada terminándose la obra el 21 de febrero de 1740. El templo quedo con una nueva portada en la que aparecen pequeños proto-estípites enmarcando el nicho central como precursores del estilo churrigueresco. Su interior fue ricamente decorado con retablos en madera tallada y dorada siendo el del altar mayor y sus colaterales los mas bellos y suntuosos, ya que en ellos no se escatimaron gastos llegando a costar más de 14 mil pesos. La capilla de la Preciosa Sangre también fue ampliada y mejorada añadiéndosele una buena cúpula. En esta capilla se veneraban dos imágenes: la de un Cristo crucificado y la del Señor atado a la Columna, las cuales eran sacadas en andas en la procesión del jueves santo.
El templo parroquial contaba con una plazuela hacia el poniente y un regular atrio hacia el frente y hacia el sur. El edificio del hospital también fue reconstruido en el siglo XVIII, se encontraba al norte junto a la capilla. En la plazuela se instaló un mercado que tenía fama de ser el más insalubre de la ciudad. Muy cerca de la parroquia se localizaba el edificio de la Real Fábrica de Tabaco que después fue trasladado al inmueble de la Ciudadela. En el siglo XIX el interior del templo fue redecorado en estilo neoclásico, retirándose los altares barrocos. En el presbiterio se colocó un nuevo altar de corte academista con un templete al centro que guardaba la imagen de la santa titular. Entre 1810 y 1815 se construyeron edificios de mejor calidad arquitectónica en torno a la plazuela pero a consecuencias del mercado la zona siguió siendo insalubre, a tal grado que a su población fue de las mas diezmadas por la epidmia de cólera de 1833. A consecuncia de las Leyes de Reforma el antiguo hospital fue vendido a particulares y la parte del atrio sur fue ocupada por construcciones que taparon la fachada del templo dejando un estrecho callejón para el acceso lateral.
Durante el siglo XX el inmueble federal declarado monumento histórico fue perdiendo su antiguo esplendor quedando prácticamente en el olvido. En la década de los 60's fueron reestructurados el arco del sotocoro, los arcos torales y la cúpula del templo debido al fracturamiento de estos elementos. En 1967 se demolió la construcciión de una planta que se encontraba adosada pór el suroeste, recuperandose el atrio ori ginal que fue pavimentado con lajas de piedra. La plazuela también fue remodelada colocándosele cuatro fuentes y el monumento a Leona Vicario. Entre 1979 y 1983 el templo fue nuevamente intervenido pero los sismos de septiembre de 1985 volvieron a afectarlo estructuralmente. siendo reparada la capilla de la Preciosa Sangre en 1986. En la actualidad el templo parroquial se encuentra sumamente deteriodado presentando grietas y desplomes de consideración en algunos de sus elementos debido a hundimientos diferenciales de capas del subsuelo. El piso de la nave acusa varias fracturas así como las pilastras, arcos y bóvedas que además presentan grandes humedades y desarticulación de sus piezas.
DESCRIPCION ARQUITECTONICA
El templo parroquial de Santa Catarina Mártir es de una sola nave con su planta en forma de cruz latina. La nave esta situada con el testero hacia el oriente y el acceso hacia el poniente. Está formada por seis tramos que corresponden: el primero al coro, los tres siguientes a la feligresía, el quinto al crucero con sus dos transeptos y el último al ábside o presbiterio. Su estructura es a base de muros de carga y contrafuertes o estribos de mampostería de tezontle. Por el interior cada tramo está dividido por pilastras de sillares de cantera que sustentan los arcos fajones y formeros también en cantera, de la cubierta. Una banda moldurada recorre los muros laterales de la nave a la altura de los capiteles e impostas de los arcos. La cubierta es de cañón corrido con lunetos. La cúpula del crucero se desplanta sobre los arcos torales y sus pechinas. Es de planta octagonal y con forma de media naranja dividida en ochos gajos. En su parte inferior se alojan ocho lucarnas con arcos de medio punto a manera de falso tambor. El coro alto descansa sobre un arco eliptico rebajado. Del lado norte del sotocoro se encuentra adosada la capilla dedicada a la Preciosa Sangre de Cristo. Esta capilla está formada por cuato tramos cubiertos por una bóveda de cañón corrido con lunetos exceptuando el tercero que ostenta un pequeña cúpula. Existen otras dos capillas adosadas a lo muros laterales de la nave del templo en el tramo anterior al crucero y ambas estan formadas por dos tramos. La sacristía del templo se encuentra adosada al muro norte del presbiterio y su acceso es través del muro oriente del transepto norte. Hacia la parte sur de los dos últimos tramos de la nave se encuentra el anexo de dos plantas utilizado para las oficinas parroquiales y la casa cural. Este anexo da a la calle de Nicaragua y se comunica con el templo a través de un vano en el muro del transepto sur del crucero.
Al frente del templo se encuentra un pequeño atrio que da la vuelta hacia el sur para abarcar la fachada lateral y su acceso. La fachada principal tiene una sobria portada de cantera labrada flanqueada por dos pequeños contrafuertes rematados en pirámide. La portada está formada por dos cuerpos y un remate. El primer cuerpo tiene el vano de acceso al centro, con arco de medio punto y un par de pilastras con el fuste estriado a cada lado. Las pilastras descansan sobre un pedestal que marca dos tableros y sustentan un entablamento con un friso moldurado y la cornisa en voladizo.
Al centro del segundo cuerpo se aloja un nicho con arco de medio punto que guarda una imágen de Santa Catarina. El nicho esta flanqueado por pilastrillas en forma de estípite y a sus lados hay pilastras pareadas de igual forma y disposición que las del primer cuerpo. Un enta blamento de ancho friso corona este cuerpo con los extremos en diagonal a manera de frontón truncado. El remate de la portada lo constituye la ventana que ilumina al coro con un enmarcamiento de cantera y dos claraboyas ovales a eje con las pilastras del cuerpo precedente. Encima de la ventana unas molduras forman un frontón truncado muy abierto. La fachada está rematada por una gran curva terminada en cornisa. A su lado izquierdo se encuentra una pequeña espadaña de tres cuerpos desplantada sobre una cornisa de cantera. Del lado derecho de la fachada, en la esquina sur poniente del templo, sobresale la imponente torre y su campanario. La torre es de dos cuerpos, separado el primero del segundo por una cornisa de cantera y rematado el segundo por un entablamento de cantera que acusa en su friso triglifos y metopas. Las esquinas de la torre están tratadas con un sillarejo en dentellado y la cara poniente acusa una cruz de cantera en el zócalo y luego, en sentido ascendente, cuatro ventanas rectangulares. El campanario es de dos cuerpos con vanos de arco de medio punto en las cuatro caras y pilastars sobrepuestas de sección circular en las esquinas. Los vanos del campanario tienen barandales de hierro forjado. Un entablamento también con triglifos y metopas en su friso, separa al primer cuerpo del segundo y en las esquinas acusa unos jarrones en cantera a manera de remate. El segundo cuerpo del campanario está remetido y es de menor sección y altura que el primero aunque mantiene la misma composición. Esta rematado por un cupulino sin linternilla coronado por una cruz de cantera.
La fachada sostiene un gran movimiento derivado del juego de volúmenes en diferentes planos, los arcos formeros de los tramos de la nave, los contrafuertes de los muros con sus remates en forma de pináculo, los arcos invertidos del pretil y la gran cúpula con los remates de las lucarnas y la linternilla con su cupulín. En el tercer tramo de la fachada se destaca la portada del acceso lateral compuesta en un cuerpo con su remate. En el primer cuerpo se encuentra el vano con arco de medio punto acusando sus impostas con las jambas tratadas a manera de pilastras, las cuales al igual que el arco estan decoradoas formado un almohadillado. El portón de madera es del tipo entablerado. Un gran entablamento moldurado con la cornisa en voladizo termina el cuerpo y sirve de desplante al remate formado por un gran tablero de cerramiento poligonal con el enmarcamiento acodado en las esquinas. Al centro se encuentra un relieve que representa a la Sagrada Eucaristía formada por un caliz y la hostía radiante de resplandores. A los lados del tablero, a eje con las jambas del acceso, se encuentran unos remates en forma de pináculo. Unas molduras curveantes bajan de la parte superior del tablero hacia los pináculos. Una sencilla cruz corona la portada. Toda esta fachada es de un gran barroquismo que desgraciadamente no se alcanza a percibir por la supresión de los aplanados que han dejado las mamposterías de los muros expuestas a la degradación por la intemperie, la filtación de aguas pluviales, la proliferación de parasitos vegetales y la erosión eólica.
El interior del templo es de gran sobriedad aunque se encuentra muy descuidado y amerita grandes reparaciones. En los muros laterales se encuentran altares de líneas neoclásicas pero todos son diferentes en forma y tamaño. El altar mayor y sus colaterales son a base de tableros y pilastras. El principal ostenta al centro un templete a manera de ciprés con columnas compuestas y un Cristo crucificado en lugar de la santa titular. El altar esta rematado por una imágen de la Purísima Concepción rodeada por una gloria de nubes y querubines así como exagerados y grotescos resplandores que ocultan la pintura del tímpano del muro testero. Un púlpito de madera de buena factura se encuentra adosado a una de las pilastras de la nave sobre una base de cemento, lo cual lo demerita. Pareciera que no es el original ya que para colocarlo se debastó la media caña central de la pilastra. El púlpito es rectangular a manera de tribuna pero el tornavoz es circular. Las bóvedas ya fueron desprovistas de sus aplanados mostrando sillares de tezontle de su aparejo así como las incontables grietas y humedades. Los sillares de cantera de las pilastras y arcos también muestran el descuido por falta de un adecuado mantenimiento preventivo y correctivo ya que presentan salitre, humedades y en algunos casos la exfolición de la cantera. El piso de loseta de pasta se encuentra sumamente fracturado por las grietas producidas por los hundimientos diferenciales del subsuelo.
