La portada se desarrolla en dos cuerpos y remate, separados en tres calles. Al centro del primer cuerpo se ubica el acceso de medio punto, flanqueado por pilastras que sostienen un entablamento y continúan al segundo hasta rematar con florones con guirnaldas. Dos peanas sin escultura ocupan las calles laterales del primer cuerpo.
Dos altos basamentos flanquean la portada. Tanto los campanarios como el remate del frontispicio están forjados con tabique, y pertenecen a una etapa de construcción posterior a la original.
Conserva en su interior retablos de diferentes épocas que van del siglo XVII al XIX, y un órgano de fuelles.