Santiago Mexcala (Texcalcingo) fue uno de los pueblos subordinados a Teutitlán, que sobrevivió a las reducciones de 1600.
El templo de Santiago Apóstol que se conserva hasta nuestros días es de una nave, con el presbiterio más angosto y sobre un podium.
Su portada está reforzada por dos contrafuertes laterales y dos al frente; consiste únicamente en el acceso porticado que remata con una cornisa que sobresale, y se repite hacia arriba para delimitar la ventana coral. Un frontón triangular con un óculo y cruz en el tímpano rematan el frontispicio.