San Juan Bautista

Antecedentes históricos

Ubicación.
La localidad de San Juan de Viña se localiza a un costado paralelo a la carretera que comunica a la población de Opopeo con Tacámbaro después de pasar Quiteria, con una pendiente de norte a sur, el poblado se desarrolla de la misma forma en un desarrollo lineal sobre el camino vecinal que conforma la calle principal que recientemente fue pavimentado quitándose el antiguo empedrado que lo recubría. El pueblo conserva aún su tipicidad a través de una arquitectura de gruesos muros de adobe con techumbres de vertientes inclinadas cubiertas con teja, siendo el curato un elemento que se mimetiza con la arquitectura doméstica del lugar, no así la iglesia cuya fachada recién remodelada y recubierta con tabicón muestra aspiraciones de arquitectura toscana del románico previo a la etapa gótica.


Antecedentes:

No contamos con documentación sobre esta iglesia, sin embargo cuando en 1984 el ingeniero Santiago Escobedo León supervisor de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología realizó la visita al lugar a fin de recabar los datos para la Regularización Jurídica y Administrativa de Inmuebles Federales a cargo de la Arq. Gloria Álvarez, le reportó los datos que los vecinos del lugar llamados: Luis Correa Rouda, Hildeberto Botello y Víctor Franco Méndez le aportaron.

En dicha información indicaron que la iglesia databa de " 1907 y que fue construida con las aportaciones de los vecinos con el apoyo del cura que entonces residía en Tacámbaro "


Descripción:

La cédula levantada por el Ingeniero Escobedo dice: " ubicada en una zona rústica, con servicios incompletos. Cimentación de piedra brasa; muros de adobe; estructura de madera; entrepisos de duela; techos de lámina de asbesto; aplanados de cal y arena; pisos de mosaico; puertas y ventanas de madera; vidriería sencilla; y carpintería común " El estado se reportó como " bueno y abierto al culto público desde 1907 " al parecer sin interrupción.

Actualmente el conjunto consta de templo, curato antiguo y anexos de bodegas además de un dispensario que en parte fue construido recientemente.

El atrio consiste en un espacio empedrado con piedra laja colocada de manera irregular al que se sube desde el nivel de la calle, está delimitado por una reja y por construcciones recientes que indudablemente ocupan parte del antiguo espacio atrial, baja al fondo del mismo hacia lo que es un terreno que posiblemente forme parte del conjunto religioso.

La fachada actual de la nave que ve hacia el sur, está revestida de tabicón y copia las líneas de diseño propias de las obras del antiguo arte románico europeo, aunque el acabado gris de tabicón le da un aspecto desagradable ocultando además el muro de adobe del que han desaparecido los vestigios de la antigua fachada de la cual quizá el único elemento superviviente es el arco de medio punto que conforma el acceso.

El paramento que conforma la fachada actual tiene un guardapolvo de piedra irregular junteado en blanco que no mejora su presencia. El diseño actual está constituido por un vano de medio punto flanqueado por dos volúmenes resaltados del paño central que se cortan por elementos alargados rematados en su parte alta por medios puntos que enmarcan nichos abocinados en uno de los cuales se encuentra una escultura de pie sobre una peana de cantera.

El acceso principal al centro de la fachada es de medio punto, sin jambas ni impostas, la puerta es de madera entablerada de regular factura y está pintada de rojo. Sobre el vano del acceso se localiza un volumen resaltado en el cual se insertan las ventanas del coro, ambas también alargadas con dintel en arco de medio punto. Los tres elementos resaltados se protegen en su parte alta con tejas de barro que sirven de límite al recuadro inferior de la fachada que remata con un frontón triangular que delimita el paramento pero que no coincide con las vertientes del tejado.

La torre se localiza separada de la nave en la esquina sur oriente de la misma, tiene también el diseño alargado de las obras toscanas del arte románico, tiene planta cuadrada y consiste en un elemento de considerable altura, hecho en tabicon desplantado sobre un rodapié de piedra al que se le hizo un junteo tipo gusaneado que le da una fea apariencia. Sobre el rodapié una ventana de medio punto ilumina el bautisterio que ocupa la sección inferior de la torre y al que se ingresa por el interior de la iglesia.

El campanario está indicado por la apertura secuencial de vanos alargados similares a los que componen la fachada, dos inferiores de mayor altura y tres superiores de menor tamaño; estos cinco vanos se localizan en las cuatro caras de la torre. El remate es un chapitel piramidal recubierto de teja.

La planta de la nave es rectangular, con piso de mosaico que sube tres niveles hacia el presbiterio y atrás de la mesa del ara dos más conducen hacia el retablo. Este último es de piedra que recientemente fue pintada de color rosa y pese a ello no tiene mal diseño, es de un solo cuerpo y una sola calle.

Tiene al centro un arco de medio punto ornamentado con flores y delimitado en el extradós por molduras de media caña, se apoya en pilastras estriadas de capitel corintio que se flanquean por otras de similar diseño pero de mayor tamaño que delimitan el cuerpo y se prolongan uniéndose a través de un entablamento ornamentado a la manera ecléctica, con pinjantes en el friso a manera de cortinajes y un remate superior conformado por un óvalo con la talla del Sagrado Corazón al centro del que emergen guirnaldas roleadas en ambos extremos.

Sobre la peana central está la imagen en bulto del patrón San Juan el Bautista. A cada lado del altar está una peana de piedra, una sustenta la imagen de la Inmaculada Concepción y la otra la de San José con el niño. En la esquina derecha del ábside se localiza una pila bautismal cuya factura es indudablemente del siglo XIX. No existen bienes muebles de interés excepto los ya mencionados.

Los muros son de adobe, aplanados y encalados por el exterior, mientras que por el interior tienen un guardapolvo de piedra aparente con junteo a la cal mientras el resto del muro tiene aplanado terciado y pintura vinílica. La techumbre es de madera con vigas pares apoyadas sobre un caballete central, fajillas paralelas al caballete sustentan láminas de galvateja. Por el interior la estructura se oculta mediante un falso plafón plano de duela pintada al aceite en color crema decorado por una cenefa en color café sin interés alguno.

A mitad de la nave una puerta conduce hacia el patio de la casa cural que también se comunica desde la sacristía a la que se ingresa desde el presbiterio.

La iluminación del espacio interior es suficiente y se logra a través de vanos rectangulares enmarcados al interior con piedra también recién pintada de rosa, la carpintería se cambió en la última intervención por herrería metálica y conservó los vidrios corrientes.

El coro se ubica al pie de la nave sobre la puerta, se delimita por un barandal de madera torneado y está soportado por dos pies derechos de fuste cilíndrico que desplantan de basas toscanas de cantera rematando a manera de capiteles en zapatas labradas con sencillos pechos de paloma. Una viga corrida apoyada sobre dichas zapatas y canes colocados en los extremos emergiendo de los muros largueros, sirve de elemento de carga al que se fija un enduelado que repite el diseño de la techumbre superior.

El anexo a la derecha de la fachada hacia el lado oriente funge como un dispensario que consiste en dos reducidas habitaciones con un portal al frente, aunque los muros son de tabique y las ventanas de herrería, la techumbre a dos aguas desplantada sobre vigas con cabezas labradas en pecho de paloma armoniza con la arquitectura local, ya que el asbesto con el que se recubre mimetiza con el tejamanil, material propio de la región. El portal al frente es a base de gruesas pilastras de tabique que soportan una viga que a su vez sirve de apoyo a las vigas del holladero que se encuentran protegidas en su lecho superior por tablas que conforman el tapanco.

El curato ubicado al lado opuesto de la torre en el lado poniente de la nave ocupa la esquina del terreno con el camino vecinal, es en este camino hacia donde orienta su entrada principal, por lo que la fachada lateral del curato es la que ve hacia el atrio. En este último paramento destacan dos gruesos contrafuertes escalonados de piedra que refuerzan los muros, los restos de otro dan un toque estético al paramento que se encuentra enjarrado y pintado de blanco en el que observamos dos de los vanos originales, de diseño cuadrado con carpintería de madera que tienen repisas y dinteles hechos de viga. Dos vanos se abrieron recientemente así como un balcón (tapiado) que indica el descanso que permite el acceso al coro.

La casa cural rodea un patio encementado formando una "L", en la crujía a dos niveles que comunica con la calle lateral se localiza el zaguán y la puerta principal de menor tamaño así como varias ventanas cuadradas; otra sección es de una sola planta y en ella se localiza la sacristía. Los muros están construidos con adobe y piedra, las puertas son de madera y tienen amplias chambranas del mismo material. Todas las habitaciones conducen al pórtico que rodea el patio central, este último está conformado por pies derechos de fuste cilíndrico desplantados sobre basas de cantera con plintos cúbicos de mampostería que tienen zapatas labradas y cargan vigas unidas a media madera que sustentan la viguería del holladero a la que se fijan tablones en el entrepiso y tejamanil en la techumbre.

En el segundo nivel los pies derechos son similares aunque de mayor altura, sin basas de piedra y se unen entre si mediante barrotes de madera torneada formando un barandal corrido que protege el corredor.

La estructura del techo del curato, que es el área que tiene dos plantas, está resuelto a dos aguas, se protege de manera distinta: en la vertiente que da hacia el patio interior de la casa tiene lámina de asbesto y en la que da hacia la calle el recubrimiento es de teja. Un canalón perimetral capta el agua que baja por un tubo de lámina de zinc desembocando en un dado de mampostería a partir del cual se desplaza oculta hacia los drenajes. En la sección de la sacristía resuelta en una sola planta la armadura es de morillo y se cubre también de lámina.

Las habitaciones rodean el patio protegiéndose mediante los pasillos porticados, los muros están aplanados y pintados de blanco a la cal con guardapolvos almagre, color que aplicado al aceite protege toda la madera.