Según la leyenda de las apariciones de la Guadalupana, la segunda se dió cuando Juan Diego, preocupado por la enfermedad de su tío Juan Bernardino, no quiso encontrarse con la Virgen por segunda vez por temor a perder tiempo. Sin embargo la Virgen se le apareció a pesar de haber cambiado de camino. La Guadalupana le dijo que no se preocupara por su tío porque ella lo curaría. En el óleo Juan Diego aparece en el ángulo inferior izquierdo de la composición guiado por dos ángeles que hacen las veces de guardianes para que este no escape a su encuentro con la Virgen.
Observaciones del bien mueble
La autoría está dada en función de las características formales y técnicas que guardan esta obra y la Virgen de Guadalupe que está firmada por este autor. Presenta repinteS.