San José parado sobre el mundo, carga al niño Jesús con su brazo derecho, mientras sostiene una vara con flores blancas. Sus pies descansan en querubines, y el Espíritu Santo en su advocación de paloma, los bendice con su luz desde las alturas. Cuatro religiosos agustinos veneran a San José y al niño, cada uno de estos porta un símbolo religioso. Están rodeados de querubines y nubes.
Observaciones del bien mueble
Firma:
Juan Balthasar Gómez pins: Salmatica a 12 de Nobienbre de 1768 años.