Cristo muerto, acostado dentro de un camerín con cristal. Su frente se ve sangrante; tiene heridas en sus rodillas y pies. Lleva un cendal blanco, manchado de sangre que escurre de la herida de su costado. Por la flexión de las piernas, fué un cristo crucificado.
Observaciones del bien mueble
Le faltan dos dedos de la mano derecha, la almohada, peluche y lienzo que lo cubre son recientes.