Escultura en que se representa a un arcángel, de pie, con vestimenta -barroca- de soldado romano. Carece de alas. En una de sus manos lleva una balanza dorada, con dos platos, con la otra, sostiene en alto, levantando el brazo, una espada. Por sus atributos se trata de San Miguel Arcángel como pesador de almas, en el día del Juicio Final. Lleva pectoral adornado con estrellas doradas, -en estofado- faldón ocre-dorado y manto rojo con mucho vuelo. Su tocado de militar adornado con moldura que semejan plumas de colores. Calza crepidas.
J. F. Roig. Iconografía de los santos, 1950, pp. 200.