San Isidro fue labrador en Madrid, en el siglo XII. Lleva el traje de los antiguos labriegos de Castilla, chaqueta y calzón corto. Se presenta con barba y cabello hasta el hombro. Sus atributos son la pala de largo mango que sostiene con la mano y los bueyes arando el campo que se presentan al fondo de la escena, mientras el santo reza.
Observaciones del bien mueble
Se ubica al centro del primer cuerpo del retablo. Está sobrepuesta; no corresponde a este retablo.
Presenta roturas en el soporte y deformaciones en la zona del bastidor. Se observan escurrimientos y abrasión en la capa pictórica.