Imagen nada convencional en la que se presenta a la Virgen María como pastora de las almas representadas por ovejas, dialogando con Jesús, su hijo.
Jesús es representado como niño en actitud magistral, rodeado también por ovejas. El niño Jesús lleva sobre su pecho un corazón coronado por la cruz, lo que le presenta también como la advocación del Sagrado Corazón.
Combina elementos de varias advocaciónes: Jesús maestro, Jesús Divino Pastor, la Divina Pastora y el Sagrado Corazón de Jesús, esta última de gran popularidad a todo lo largo del siglo XIX.
Esta imagen puede tener su antecedente en alguna estampa o grabado popular.
