Representa A La Inmaculada Concepción Emergiendo De Un Banco De Nubes Y De Pie, Simbolizando El Triunfo De María Sobre El Mal. Nos Recuerda La Imagen Apocalíptica De San Juan, Ya Que Alrededor De Su Cabeza Está Un Halo Luminoso Y Enmarcándolo Doce Estrellas. El Rostro Es De Una Mujer Joven De Nariz Recta Y Labios Pequeños, Bajo Su Barbilla Se Distingue Una Ligera Papada, Los Ojos Miran Hacia Arriba En Señal De Arrobamiento Y El Cabello Cae Atrás De Sus Hombros Sobre Su Espalda.
Viste Túnica Blanca Con Cuello De Encaje Y Amplias Mangas Ceñida Al Cinto Por Un Cordón Dorado. Une Las Manos Al Frente Con Las Puntas De Los Dedos Apenas Tocándose En Acto De Oración, Bajo La Túnica Podemos Ver Las Muñecas Cubiertas Por Mangas Color De Rosa. Se Cubre Con Un Manto Azul Que Cruza Sobre Su Hombro Izquierdo Y Vuela Con Cierta Dificultad Hacia El Lado Opuesto, Indicando Dificultad De Trazo.
Los Pliegues Del Vestido Permiten Ver Su Pierna Derecha Flexionada Y En La Parte Baja Los Pies Calzados Con Sandalias Parados Sobre La Luna, Que A Su Vez Reposa Sobre La Esfera Azul Del Mundo, En El Que Se Enrosca La Serpiente.
Esta Última Lleva En Las Fauces Un Fruto, Que Todo Parece Ser Menos Una Manzana, Ya Que Las Hojas Corresponden A Otra Especie Vegetal (liquidámbar O Maple).
Uno De Los Extremos De La Luna Coincide Con Los Labios De Un Sol Que Asoma Por El Costado Izquierdo De La Virgen.
Este Detalle Del Cuadro Nos Indica La Supervivencia Del Mito Solar Y Lunar Prehispánico Y Su Fuerte Arraigo, Lo Que Hace Que Este Lienzo Adquiera Gran Interés Iconográfico.
Observaciones del bien mueble
Presenta pérdida de policromía y del lienzo, sobre todo en la parte inferior. El deterioro de la capa de barniz ha propiciado oxidación de los pigmentos.
