Virgen de los Dolores

Descripción del bien mueble

Se trata de una escultura de bulto, de cuerpo completo que representa a la Virgen María en su iconografía de Virgen de los Dolores. Está vestida con túnica oscura y manto negro que la cubre desde la cabeza, vestimenta seguramente posterior a la creación de la obra. La cabeza mira hacia arriba con las manos juntas en oración. Se trata de una imagen de vestir, articulada, con ojos de vidrio y pesatañas postizas. La posición de las manos y la cabeza, además del gesto del rostro, permite pensar en la iconografía de Dolores. A esto habría que agregar que tiene el corazón atravesado por una daga símbolo de esta representación.

El arte de la Edad Media concedió un amplio espacio para esta representación en la que la Virgen aparecía con Cristo muerto en sus rodillas después del Descendimiento de la cruz, o ya sola luego del Entierro.
En este caso, se trata del dolor de María representado a partir de la espada en el pecho y que finalmente es el antecedente de la Virgen de los Siete Dolores donde se la muestra con Siete espadas atravesando su corazón.
De todos modos no habría que descartar la posibilidad de que esta pieza forme parte de un Calvario junto con la de San Juan de este mismo templo, ya que ambas se complementan en su composición, medida, están articuladas y son del mismo período.
La iconografía de la Virgen Dolorosa se remonta al siglo VII. Posteriormente esta devoción se encontrará ligada a los escritos de San Idelfonso de Toledo y del sacerdote flamenco Coudenberghe quien mandó a pintar los siete dolores de la virgen. Luego de establecida su iconografía este sacerdote fundó la Cofradía de los Dolores en 1490. Desde el siglo XIV aparece la Virgen con un solo puñal en el pecho que alude a su dolor más grande, la muerte de su hijo.