Ángel

Descripción del bien mueble

Escultura de bulto de cuerpo completo que representa un personaje de pie sobre la base que remata la calle lateral de la portada del templo. La figura adelanta el pie de la derecha y se apoya firmemente sobre el de la izquierda, este movimiento le da dinamismo a la figura que parece haberse detenido hace un instante. La posición de los brazos acompaña esta actitud firme. Los brazos se adelantan al tronco, una mano se apoya en la cadera mientras que la otra sostiene cuero recortado o pergamino una especie de paño donde se puede apreciar un sol con rostro. El ángel es un joven vestido con una túnica que destaca se ajusta a la cintura y está descalzo, mira hacia el frente inclinando un poco la cabeza hacia abajo. Su juventud es visible en su cuerpo atlético y su cabello ensortijado.
Dionisio Aeropagita, en su tratado De la Jerarquía celeste, fue el primero que estableció que los Coros Angélicos sumaban nueve. Este tratado fue introducido a Occidente por San Gregorio Magno y traducido al latín por Juan Scoto Irlandés. Sin embargo, santo Tomás de Aquino, con su autoridad consagró la doctrina. Estos Coros Angélicos, según la letanía lauretana, tienen por soberana a la Virgen María y se dividen en tres órdenes o grupos: los Arcángeles ocupan el mismo que los Principados y Ángeles; curiosamente, ellos son, dentro de las cohortes celestiales, los únicos que escapan al anonimato y los que, en la iconografía cristiana ocupan un lugar preponderante. Junto con Dominaciones y Principados, los Arcángeles, en su carácter de luchadores contra el demonio, se caracterizan por sus atributos guerreros.
La indumentaria guerrera inspirada en la antigua Roma, es sin embargo de introducción tardía, ya que esta aparece con la obra de los romanistas del período manierista en el siglo XVI, en Europa.
Tanto Pacheco como sor María de Agreda influyeron definitivamente en la manera de vestir a los ángeles dentro del arte barroco español (Ver Francisco de la Maza, El pintor Cristóbal de Villalpando)
Según Toussaint, el pintor flamenco Martín de Vos fue uno de los que sentaron las bases de los dos tipos de ángeles que pueden encontrarse en la pintura novohispana.