Vaso litúrgico metálico, dorado, con la mitad superior del recipiente, lisa, pulida y la inferior decorada con motivos vegetales (hojas). Se desprende de aquí un elemento largo, a manera de balaustre, en cuya parte superior se observa un abultamiento, decorado a su alrededor con formas ovaladas. El pie, a manera de una copa invertida, de boca muy ancha ostenta una decoración a manera de rayos cortos hendidos. El plato, metálico, dorado, sin decoración.
CALIZ: Copa de oro o plata en la que se vierten el vino consagrado y el agua en la Eucaristía, para que la compartan los fieles en la comunión, pues alude a la Ultima Cena y al Sacrificio de Cristo en la cruz, simbolizando la fe Cristiana.
J. A. PEREZ.
Diccionario de Símbolos y Mitos, 1971, pp. 108.