Cáliz de planta lobulada, con pestaña horizontal, ligeramente moldurada y, a continuación, otra pestaña vertical, lisa, sobre la que se levanta el pie, ligeramente elevado, dividido en gajos, cuya separación es por medio de unas finas guías vegetales. Cada sección está ornamentada con diversos motivos en relieve, entre los que destacan motivos vegetales y unos querubines.
A continuación, sobre el pie y separado por una delgada pestaña circular, se levanta el ástil, con formas abalaustradas, nudo con forma de caldero con base ancha, circular, agallonada y cuerpo cónico truncado. La parte superior está decorada con una serie de bastoncillos minúsculos. La copa es de labio abierto. La subcopa es ligeramente bulbosa y está ornamentada con guías vegetales y querubines.
La patena tiene forma circular de plato extendido, con amplia pestaña horizontal y en su centro está ornamentada por una cruz estilizada inscrita en un círculo.
C. Esteras Martín. Orfebrería Hispanoamericana, Siglos XVI-XIX, 1984
Observaciones del bien mueble
Por su diseño, el Cáliz es más antiguo que la patena.