Vaso litúrgico en forma de copa, con su parte superior e interna lisa, de metal dorado, y la parte inferior externa, así como la base, profusamente decorada con estrías y pétalos estilizados. Pequeño plato dorado sin decoración aparente. Caliz: Es un vaso sagrado en que se verifica en la misa el cambio del vino en la Sangre preciosa del Redentor.
Debe ser de materia preciosa, o al menos dorado por dentro y debe estar consagrado por el obsipo. J. R. Faría. Curso superior de religión, 1942, pp. 481. Patena: Es uno de los vasos sagrados que sirve para el sacrificio de la misa. Su forma es hoy la de un pequeño plato o disco cóncavo en su parte interior y suficientemente capaz para que en él se pueda colocar la hostia... No expresa el Evangelio sí Jesús al instituir la Eucaristía puso el pan consagrado en este vaso, pero su uso se ve desde el tiempo de los apostoles, como nos enseña la liturgia de Santiago. N. Pervio. Diccionario de ciencias eclesiásticas, T. VII, 1886, pp. 364.