La base es una tarima de tablas unidas, lisas y rectas. Al frente no tiene puerta, sólo está el frente de los lados que tienen dos acanaladuras verticales paralelas y una ala delgada y poco ancha y de pared lisa, que llega a la altura de tres cuartas partes del confesionario. Los lados están formados por paños de tablas con el bastidor evidente y al centro una rejilla tapada con una tela de franela roja, en la parte inferior de cada rejilla hay una repisa delgada sujetada al centro por una escuadra de madera. En la parte del interior del confesionario hay un asiento formado por una tabla y tiene repisas delgadas a cada lado. La parte superior de la parte posterior y de los lados tiene decoración con pináculos. La parte posterior es lisa y con el bastidor resaltado. Está todo barnizado.