El cuerpo no tiene más movimiento que la inclinación de la cabeza hacia un costado y los pies que se cruzan para ser clavados en la cruz. El resto es de una pasmosa frontalidad. Hay una ingenua intención de reconocimiento y capacidad de representación del cuerpo humano. Toda la imagen está recorrida por gran cantidad de sangre.
Observaciones del bien mueble
Sus ojos son de vidrio y tiene pestañas. Las potencias de plata son del siglo XVIII.