Vaso litúrgico compuesto por un elemento circular con vidrio (lúnula) alrededor del cual se dispone un amplio aro con decoración vegetal, del que se desprenden alternativamente grupos de tres rayos flameantes de cristal con otro compuesto por tres hojas. Remata la parte superior una cruz metálica cuyo centro lo marca una piedra roja. Esta cruz se eleva sobre una pequeña columna de cristal. El elemento, intermedio, une este sol a la cabeza de un ángel, plateado, con las alas extendidas y vistiendo larga túnica, de pie sobre un elemento cilíndrico que a su vez se une a otro de mayor diámetro pero más angosto. El pie, a manera de copón invertido, metálico, dorado y que se apoya sobre tres patas. La parte superior (la que se une al elemento intermedio), está decorada con cuatro medallones en los que se obsevan los cuatro Evangelistas, en bulto.
CUSTODIA: Vaso sagrado en que se expone públicamente el Santísimo. Lleva una media luna llamada lúnula o viril que sirve para sostener la Sagrada Hostia y debe ser de metal fino.
J. R. FARIA.
Curso Superior de Religión, 1961, pp. 481.
SOL: Símbolo del poder de la gloria y de la espiritualidad. Considerado como el ordenador del cosmos y el inspirador de la luz, el sol ha sido comparado con Cristo "Mas para vosotros, los que temeis mi nombre, nacerá el sol de justicia, debajo de cuyas alas está la salvación". (Malaquías 4, 2).
J. A. PEREZ.
Diccionario de Símbolos y Mitos, 1971, pp. 389.
