En los evangelios apócrifos se narra el encuentro de la Virgen con su hijo cuando va en camino al Monte Calvario, en donde dice: 'Juan al principio iba siguiendo el triste cortejo, pero luego se fue a toda prisa a dar cuenta a la Virgen de lo que pasaba, pues se encontraba ignorante de ello. Al oir la Virgen el relato, quedó transida de dolor y se fue enseguida acompañada por Juan y por Marta, María Magdalena y Salomé, a la calle de la Amargura. Al ver la comitiva, preguntó a Juan cual era su Hijo. El se lo señaló, diciéndole que era el que llevaba la corona de espinas y las manos atadas...'
Observaciones del bien mueble
Se localiza en la parte superior de la tercera calle del retablo de Jesús de Nazareth.
Presenta deformaciones en el bastidor, escurrimientos y abrasión en la capa pictórica.