La columna estípite presente en los altares barrocos es el resultado de la geometrización del cuerpo humano probablemente inspirado en el dios, término que los romanos colocaban en los límites de los poblados o tal vez de los atlantes griegos. Jerónimo de Balbás utilizó los estípites en los retablos de la Catedral de Sevilla y en los novohispanos al mismo tiempo que los Churriguera. Heredero de la escuela de Balbás, Lorenzo Rodríguez difundió su uso al utilizarlos en 1749 en las fachadas del Sagrario de la Catedral de México. Otro de los seguidores de esta escuela es Ildefonso Iniesta Bejarano. Esta columna estípite tiene peanas en las tres caras de las pirámides invertidas.
Observaciones del bien mueble
Forma parte de un conjunto de dos pares de piezas que flanquean a un Cristo.
Materiales constitutivos
Madera, Cola, Blanco de España, Pigmentos al óleo, Oro