La fachada está compuesta por un arco de medio punto desplantado de jambas con base e impostas decorados con rostros de ángeles, cornucopias, hojarasca y flores; las jambas y el arco también presentan esta profusa decoración; además, el arco se enmarca con un recuadro ornamental a manera de alfiz, y en él aparece un nicho central que aloja un relieve de san Juan Evangelista con cáliz en las manos. A uno y otro lado del nicho aparecen dos grandes medallones circulares de los cuatro evangelistas.