La pintura se encuentra en la quinta calle del primer cuerpo del Retablo de Santa Rosa de Lima (Cédula No. 37). La escena está fundamentada en la biografía hecha por el dominico leonardo Hansen: "Enfermó acaso Rosa con dolor de garganta, y luego el que por hermoso es dulce imán de los deseos. como amante y como fino se apareció a la virgen, y para entretenerla y divertirla armó un juego, convidándola a que fuese competidora. Y era el partido, que el premio de la victoria quedase al arbitrio y elección del que ganase. Comenzó luego a tirarse el dado de una y otra parte, favoreció la suerte a la virgen, ganó el juego... y pidió al dulce Niño, jugador rendido,... que se mitigasen sus dolores de la garganta... cobró Rosa la deuda enseguida y sintió notable mejoría. Más el jugador divino, dando a entender que estaba resentido... volvió de nuevo a entablar de nuevo el juego, repitió y tiró, y con más feliz mano salió al cabo victorioso y perdió Rosa aquel juego. Por lo cual quizo también pagarse de contado y cobrarse en la paciencia de la competidora vencida. Aumentáronse otra vez súbitamente los dolores que la embargaron el sueño toda aquella noche...". A diferencia del relato, en esta pintura Jesús aparece como adulto y no como Niño. La santa, arrodillada y vistiendo el hábito dominico de profesa, junta las manos en señal de oración y dirige su mirada al rostro de Jesús. Este se encuentra de pie -del lado izquierdo de la composición- vistiendo túnica y manto y atrás de una mesa sobre la que se encuentra un tablero y dos dados; Jesús tiene entre los dedos de la mano derecha uno de los dados y voltea a ver a santa Rosa. Sobre la cabeza de Jesús se aprecia un rompimiento de gloria.
Observaciones del bien mueble
Presenta manchas y faltantes de la capa pictórica.
