Es el lavatorio de Sacristía, donde los sacerdotes lavaban sus manos antes de celebrar la misa, está empotrado al muro, tiene una tina cóncava para el agua, hecha de alabastro al igual que un relieve que le sirve de fondo y en el que está labrado San Agustín de medio cuerpo, sentado ante una mesa y junto a él, su báculo pastoral. Enfrente suyo se encuentran dos angelillos en actitud de venerar el Corazón Flamigero que identifica al Santo. El relieve y la pila estan enmarcados por molduraciones mixtilíneas labradas en cantera gris y decoradas con conchas, querubines, flores y rocallas. Existen restos de un color azul y filetes dorados por lo que se piensa que haya estado parcialmente policromada, para resaltar algunos elementos en la cantera
