Esta talla articulada, que se encuentra en un nicho del sotocoro de la iglesia, y que además está detrás de los barrotes, provoca una gran devoción, tal como puede verse en la cantidad de milagros que cuelgan de la reja. Lo que puede verse, manos, pies y cabeza, están recorridos por gran cantidad de sangre. La talla es de buena calidad, es decir que la madera está trabajada de tal manera que se logra extraerle cualidades expresivas.