Aparece La Virgen Luciendo El Hábito Café De Los Carmelitas. Extiende Su Amplio Manto Para Cobijar Con Él A Miembros De Ambos Sexos De La Orden, Los Cuales Aparecen Arrodillados A Su Lado. La Escena Se Completa Con Dos Ángeles A La Altura De Los Hombros De La Virgen.