Pila de agua bendita empotrada a la pared; tiene el borde redondo y el cuerpo labrado en forma de concha. En la religión católica se denomina pila de agua bendita a un recipiente de piedra u otro material situado a la entrada de las iglesias que contiene agua bendecida para que se persignen los fieles. El origen de las pilas de agua bendita se remonta a los primeros tiempos de la Iglesia Católica considerándose como tales por los arqueólogos ciertos vasos y depósitos de mármol o de barro cocido que se hallan en las catacumbas. Pero la forma y posición de las pilas, tal como se hallan ahora en la entrada de las iglesias, empezó en el siglo XII y se generalizó a finales del siglo XIV.