Puerta que ya no se utiliza como acceso al templo, pues en su interior esta cegada. Está tallada con la leyenda de la Santa titular del templo y es continuación de la otra puerta. En los páneles inferiores se aprecia el momento en que la santa ha sido degollada y le brota la sangre; y el momento en que intentan quemarla viva y las llamas se apartan de su cuerpo por obra de unos ángeles que arrojan agua con unos cántaros. En los paneles medios se ve a la santa con su cordero dando la mano a una devota y un matrimonio, que acaso sean los donantes, rezando ante un altar. Los paneles superiores ostentan los lirios de la pureza y las palmas del martirio.
Observaciones del bien mueble
Muestra bastante deterioro por raspaduras y polilla; algunas figuras han perdido sus rasgos y está invadida la zona por ambulantes que deterioran más las puertas.