Es un retablo de dos cuerpos y tres calles de estilo barroco estípite, característico del siglo XVIII en la Nueva España. La calle central se desplanta sobre una basa de cantera escalonada, posee un fanal en el segundo cuerpo y es coronada por un lienzo del Padre Eterno rematado con un ático capialzado y mixtilíneo. Se nota el espacio de una predela hoy desaparecida. Las calles laterales se desplantan sobre peanas, las columnas continúan hasta rematar con un capialzado mixtilíneo. El retablo posee cinco lienzos.
Observaciones del bien mueble
El retablo de Los Cinco Señores está en buen estado de conservación.
Materiales constitutivos
Madera, Cola, Blanco de España, Pigmentos al óleo, Oro