En el remate del retablo, hay un óvalo donde se lee la inscripción: Quis Ut Deus (Quién como Dios) lo que prueba que hubo un cambio de advocación del retablo, que originalmente debe haber estado dedicado al arcángel san Miguel. El cambio de color y la diferencia en el trabajo del labrado de la cantera en el centro del banco, parecen indicar que hubo una intervención en esta zona de la obra.