El retablo es de estilo neoclásico, cubre por completo el muro y está compuesto por un basamento de mármol, un banco con un nicho al centro, y un solo cuerpo. En la parte central, apoyado sobre el banco, se localiza un fanal flanqueado por un par de columnas de fuste estriado y capitel coríntio; a cada lado se encuentra un nicho que aloja una escultura. Sobre las columnas corre un entablamento que carga una balaustrada y un par de medallones.