Representación de San Jerónimo arrodillado, inflingiéndose castigo de penitencia. En la mano derecha tiene una piedra, con la que se ha profucido las heridas que se le observan en el pecho, a la vez que levanta el brazo izquierdo y mira al cielo en señal de súplica. Tiene un cendal y una capa dorados y con trabajo de estofado, con motivos geométricos y de follaje; su barba gris está bien moldeada y tiene ojos de vidrio pintado y dientes probablemente naturales. La base es un dado bajo con molduraciones inferiores y superiores de cuarto bocel, con pintura blanca y dorado; se acopla a la escultura por medio de machembrados libres en las rodillas.
Observaciones del bien mueble
La base esta algo desgastada por colocación de veladoraS.