Imagen principal
Clave del bien mueble
MX-SC-DGSMPC-BM-003822-000023-000
Número de Cédula
23
Tipo de objeto (texto)
Pintura
Tipo de objeto
Nombre o título del objeto
San Jerónimo y San agustín
Inmueble de pertenencia
Nombre del Inmueble
Purificación de la Santísima Virgen
Autor
Anónimo
Época
S. XVIII
Siglo de creación
Descripción del bien mueble
En la predela del retablo se ubica una pintura de formato horizontal que representa a dos santos Padres de la Iglesia en retratos de busto. San Jerónimo mira hacia un libro que sostiene en la mano, mientras que alza una pluma con la otra. Frente a él el capelo cardenalicio que se ha convertido en una de sus atributos. El personaje es un anciano, de barba larga y afilada nariz. A su lado otro personaje, se trata de San Agustín, tiene mitra en el segundo plano haciendo un paralelo con el capelo de Jerónimo y en la mano, lleva una vela encendida, mientras que con la otra, sostiene un libro abierto. Ambos personajes están sobre un fondo neutro.
Se trata de una pintura bien compuesta, con identidad y que recoge los tipos físicos de la segunda mitad del siglo XVII novohispano.
San Jerónimo Sacerdote y Doctor de la Iglesia (340-420). Consejero del Papa san Dámaso, pasó varios años en Belén, llevando vida eremítica y dedicado al estudio de la Biblia, que revisó y tradujo por encargo del Papa. Como asceta se lo representa semidesnudo o con un burdo tejido de palma. Como consejero del Papa lo vemos ostentando la púrpura de cardenal. Casi siempre con larga barba.
Atributos: El suyo personal es un león dormido a sus pies; también una piedra en la mano con la que se golpea el pecho. Frecuentemente lo vemos en un scriptorium rodeado de instrumentos de trabajo. Como anacoreta tiene disciplinas, carándulas, rústico crucifijo. También lleva capelo cardenalicio colgado de un tronco o una roca. En ocasiones lo acompaña un ángel con la trompeta del Juicio Final.
La figura de san Jerónimo, como Padre y Doctor de la Iglesia, fue sumamente familiar en la Europa del siglo XV y en la Nueva España del siglo XVI. Baste recordar la multitud de pueblos que llevan como advocación la de este insigne escritor.
Alguno de ejemplos debe haber llegado al Virreinato, bien en forma de tablas flamencas, bien de grabados neerlandeses o alemanes, cuya importancia fue tan frecuente.
Por su parte San Agustín es uno de los grandes doctores de la Iglesia Latina. Está representado siempre como obispo, con mitra y báculo; pero a veces como simple monje Agustín con hábito negro y cinturón de cuero. Su atributo habitual es un corazón inflamado atravesado por una o tres flechas de que habla en sus confesiones. A partir del siglo XV se lo caracteriza como un niño que aparece en la playa, donde se empeña en vaciar el mar con una concha o cuchara.
Observaciones del bien mueble
Véase:
Roig, Juan Fernando; Iconografía de los Santos, Barcelona, Ediciones Omega, 1950.
Schenone, Héctor; Iconografía del arte colonial. Vida de Santos, Buenos Aires, Fundación Tarea, 1992.
Materiales constitutivos
Tela, Pintura
Técnica de manufactura
Óleo sobre lienzo
Alto 1
0.35
Ancho 1
1.04
Profundidad 1
0