En esta pintura aparece San Joaquín parado junto a una mesa con mantel, en actitud de abrazar a la Virgen que está de pie sobre la mesa. María tiene apariencia de persona mayor, situación que podría relacionarse con el EvÁngelio del Pseudo Mateo VI, en donde se dice que María, precisamente a los tres años "...andaba con paso tan firme, hablaba con una perfección tal y se entregaba con tanto fervor a las alabanzas divinas. que nadie la tendría por una niña sino más bien por una persona mayor". Lleva en la mano izquierda una rama de azucenas que son uno de los atributos que simbolizan su pureza. Su aureola es a base de estrellas. recordandonos las doce estrellas que rodeaban la cabeza de la Virgen Apocalíptica. En el ángulo superior izquierdo de la composición aparece el Espíritu Santo en forma de paloma enmedio de un rompimiento de gloria. En el lado derecho está representada una cortina y un sillón de formas barrocas atrás del santo. Es muy probable que la composición haya sido copiada -con algunas alteraciones- de un grabado del siglo XVI.
Observaciones del bien mueble
El marco es de reciente factura. Fue restaurada. Es del mismo autor que la pintura de "Santa Ana enseñando a leer a la Virgen María" (Cédula No. 17).