En la mayoría de las imágenes de esta iglesia, alguien se dedicó a colocarles pestañas postizas de gran tamaño. Eso las ridiculiza, según mi visión. Pero al ir tomando en cuenta estos detalles, es cuando se va tomando noción de otra estética religiosa, como también de otras formas de religiosidad. San José tiene la mirada baja, lleva al Niño en la mano derecha. El santo es joven y barbado y el Niño abre los brazos y bendice con una mano.