El personaje montado sobre un toro, porta una túnica blanca y una pluma en la mano derecha. Su mirada se dirige hacia el cielo.La pintura presenta un escurrimiento de agua al centro de la pintura, que se denota sucia y con deformaciones. Esta pintura se encuentra adherida al muro de una pechina de la cúpula.
Sobre esta pintura se lee la inscripción: SANCTUS IMMORTALIS.