Escultura que representa a un joven imberbe de pie, de tez blanca, cabello largo, ondulado y color castaño oscuro. Unicamente lleva un cendal verde pálido. La mano derecha está atada a un tronco atrás de él. La mano izquierda está flanqueando el cuerpo ligeramente separada del mismo.
En la cabeza lleva una aureola calada. En varias partes del cuerpo presenta heridas sangrantes producidas por las saetas con que lo martirizaron.
F. Roig. Iconografía de los Santos, 1950, p. 246
Observaciones del bien mueble
Ha perdido parte de la capa pictórica en varias zonas y en algunas partes está manchada. La aureola está rota.