Santa Ana significa "la bienhechora y Gracia de Dios" y se le asocia siempre con San Joaquín pues tuvieron el honor de ser los padres de la Santísima Virgen María y abuelos de Jesús. El Nuevo Testamento no menciona a Santa Ana y su nombre aparece por vez primera en los evangelios apócrifos del siglo II. Las circunstancias de su tardía maternidad están adaptadas de la historia similar de Hannah, madre de Samuel. Siempre se le coloca del lado derecho y a San Joaquín del izquierdo. Su vestimenta consiste en una túnica de color verde símbolo de la esperanza, un manto corto de color rojo relacionado al sacrificio y un roquete blanco. Durante el período barroco sus ropajes se representaron muy amplios y en el siglo XIX ropas mas cernidas y en un ambiente celestial rodeado por nubes. La fiesta se celebra el 26 de julio junto con la de San Joaquín.