Aparece al centro, el grupo formado por Santa Ana sentada en un sillón de rica y elaborada talla, San Joaquín sentado hacia el lado derecho, y la Virgen Niña entre ellos; sobre ellos un rompimiento de gloria con la imagen de Dios Padre rodeado de ángeles. En la parte inferior izquierda se localiza un perro pequeño.
Observaciones del bien mueble
Conserva un sencillo marco de madera policromada, posterior a la pintura.