La imagen representa a una mujer con un vaso de perfume en las manos, que en realidad parece un copón y tiene por contexto, un paisaje y un cielo con las tonalidades del amanecer.
Es posible que esta forma de representar a la Magdalena haga referencia al amanecer del día de la resurrección de Cristo cuando las santas mujeres, entre ellas la Magdalena, fueron a ungir el cuerpo de Cristo y llevaban lo necesario para ello.