Representación tradicional de una Trinidad Heréctica, en que aparecen las tres divinas personas de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo como figuras humanas idénticamente vestidas. Está colocada en un marco dorado.
Observaciones del bien mueble
La pintura presenta roturas y desprendimientos de la capa pictórica en algunos puntos. El marco muestra tramos faltantes en su moldura.
