Este tipo de representación de la Santísima Trinidad tiene también el titulo de Compassio Patris o Padre compasivo, y muestra al Padre Eterno sosteniendo a Jesucristo desclavado de la cruz, muerto, sobre su regazo. Es el Padre compasivo y doliente, muy semejante a las representaciones de la Virgen de la Piedad.
Cabe señalar que en estas obras las paloma del Espíritu Santo puede aparecer, como en este caso, entre las dos Personas, indicando así que es de la misma sustancia del Padre y el Hijo. La multitud de representaciones que de este tipo hay a lo largo de la geografia nacional, permiten pensar que gozó especial preferencia de los fieles devotos, ya que materializaba ante sus ojos el sacrificio redentor de Cristo.
El autor de esta obra, no conforme con plasmar este tema, quiso rodear la figura principal con una multitud de ángeles llorosos, portando los instrumentos de la Pasión y a los cuatro evangelistas.