Es uno de los sitiales del coro en la parte destinada a los canónigos se compone del asiento propiamente dicho y de un alto respaldo que se remata en una venera. El respaldo se compone de cuatro tableros mostrando en cada uno de ellos diferentes dibujos formados por las incrustaciones de distintas maderas en complicados entrelaces de estilo mudéjar, para dejar adivinar una cruz en la parte central.