Representación tradicional de la Virgen de Guadalupe, lleva túnica de color rosa y manto azul, ambas prendas con decoración en dorado, de grandes hojas y pequeñas flores en la túnica y de estrellas en el manto. La Virgen es de piel de color moreno característica de la población indígena de México, aparece suspendida entre espesas nubes que encierran y limitan el resplandor de rayos; se observa un angelito que está a sus pies como un atlante, que inclina ligeramente su cabeza hacia el lado izquierdo.
Observaciones del bien mueble
Colocada en un marco de madera que no es el original. Presenta el lienzo flojo, por lo que requiere un ajuste en los bastidores; además de desprendimientos en la capa pictórica en el ángulo inferior derecho.