A María se le representa vinculada con Jesús, en escenas tomadas de los evangelios apócrifos y por sus advocaciones. Las más populares son, entre otras, "de La Esperanza", "de Los Remedios", "de El Pilar","de La Inmaculada Concepción" y "de La Soledad" que es el momento en que la Virgen queda aislada con la profunda pérdida temporal de su hijo. Generalmente se le representa con el rostro desencajado y vestimenta compuesta por una túnica de color negro, relacionado con el luto de la tradición occidental y no el morado que sería el color del luto judío. Se celebra el viernes precedente a la semana santa. Imagen para vestir con brazos articulados. La cara en esta pieza tiene la boca entreabierta y los ojos torneados ligeramente hacia el cielo y las cejas siguiendo ese gesto, como resultado de la depresión causada por la soledad.
Observaciones del bien mueble
SEVERAMENTE DAÑADA LA FALDA, ASI COMO LOS BRAZOS ARTICULADOS. REQUIERE DE UNA URGENTE RESTAURACION.
Materiales constitutivos
Madera, Cola, Tela, Blanco de España, Pigmentos al óleo, Vidrio