La pintura original de estilo bizantino fue realizada en el siglo XIII sobre una tabla de madera. A finales del siglo XV un mercader la llevó a Roma y se le colocó en la Iglesia de San Mateo, demolida posteriormente; por un largo periodo la guardaron los agustinos en uno de sus oratorios, a mediados del siglo XIX cuando el Papa Pío IX obtuvo de nuevo la imagen se le colocó en la Iglesia de San Ildefonso, donde se encuentra actualmente. Esta estampa del siglo XIX fue traída de Roma por un padre felipense a finales del siglo pasado. La Virgen lleva en su brazo izquierdo al niño Jesús, quien vuelve su cabeza hacia la izquierda, con un gesto de admiración por la presencia del arcángel San Gabriel, que le muestra cuatro clavos y una cruz. El rostro de la Virgen tiene una expresión melancólica y de tristeza. Su fiesta: 27 de junio.
Observaciones del bien mueble
Se ubica en el Retablo del Señor de la Espina. El lienzo está flojo, por lo que requiere de ajuste en los bastidores, el marco es reciente.
