Santo Domingo se encuentra suspendido en una nube, vistiendo el hábito blanco y negro de la Orden. Con la mano derecha recibe el Rosario de mano de la Virgen del Rosario, quien se encuentra suspendida sobre una nube, con el Niño Jesús sobre su regazo. En la parte inferior, en el suelo, se encuentran los siguientes atributos: el globo terráqueo y el perro que porta la tea en el hocico, y que simboliza la fidelidad al Señor y la llama de la fe.